La utilización del láser de dióxido de carbono (CO2) fraccional es método de exfoliación de la piel. Reservado para casos de arrugas, de cicatrices acneicas, de diferencias en la pigmentación o de manchas oscuras. La aplicación de esta tecnología láser ha dado muy buenos resultados en rejuvenecimiento, con mejoras de hasta el 90% del aspecto inicial.


Durante el tratamiento con láser de CO2 fraccional se utiliza anestesia tópica o local.
Al terminar el procedimiento, la piel queda enrojecida e inflamada. Se recomienda la aplicación de las cremas adecuadas para regenerar completamente la zona.
La desaparición del enrojecimiento se da en cuestión de más o menos días, en función de la intensidad del procedimiento.
Es recomendable en los días inmediatos al tratamiento evitar la exposición directa al sol y si no es posible, utilizar siempre que salgamos un protector de protección solar total, ya que puede, en caso contrario, alterarse la pigmentación de la piel regenerada.